2 sept 2008

La vuelta al cole.

Me parece que no voy a dejar la Hostelería tan fácilmente...
Agosto se ha esfumado y sigo sin curro.
La tati tampoco ha encontrado nada. Yo prefiero que disfrute un poco, puesto que se lo ha ganado con creces. Para empezar porque ya estuvo currando en invierno, simultaneando trabajo y estudios, para sacarse el carné de conducir que necesita irremediablemente si quiere tener algo de autonomía. Y consiguió el permiso sin renovar papeles y sacando las mejores notas de los últimos años, porque lo aprobó todo en Junio. Se ha crecido en la adversidad. Desde que nos fuimos en Mayo, tuvo que depender de Ru y Nu -los tatos pequeños, con los que ahora vive en Burgos, en un pueblo de la periferia (sí, hay periferia en la aldea...¡y un montón de pisos vacíos en el centro también!), para ir y volver a clase. Es toda una mujercita. No sé cuánto tenemos que ver Ru y Nu, Giorgio y yo en que sea la persona que es... Por mi parte, dependiendo del momento anímico en el que me encuentre sumida... suelo alternar momentos de duda dispares. A veces reconozco mis propias debilidades, mi impulsividad deslenguada o mi tendencia a la inmadurez idealista, en sus ocurrencias. En esos momentos suelo pensar que las virtudes las ha tomado de mi hermano Rubén y que de mí han quedado posos de mis neuras.
Y en otras ocasiones siento ganas de espachurrarla a besos, porque veo en ella la vis cómica de mi madre,- que yo también tengo la suerte de poseer-, por su creatividad y sensibilidad especial de las que va dejando huella en quien la conoce, por su caracter arremolinado y único, que sella con esa pasional mezcla de osadía y ternura. Por su chispeante inteligencia, que siempre me hace recordar a un vivaracho ratoncillo de cuento , con miles de aventuras y azañas que contar ...y por vivir.
Al final veo una fuerte personalidad que la ha servido para salir adelante... Lo que no tengo claro es si con nuestro apoyo... o a pesar de él. Y no lo digo en sentido peyorativo. Cualquiera que se enfrente a la Educación de alguien menor, se plantea tal disyuntiva.
Como podeis comprobar al leer esto...he estado disfrutando de ella este mes. Tanto que me olvidé de la Internete bastante. El 19 de Septiembre regresa a Burgos. Así que voy a posponer la crisis económica y el batiburrillo político hasta después de su marcha. Y todas las demás cosas que os tengo que contar, que no son pocas...
Me dejaré caer por aquí... Standby.