5 mar 2022

Nana mestiza.

 Duermen las conejeras mambitas

llegadas de semillas gélidas mesetarias

que en su día no acogieron bien al hermano no nato;

como bien sabe la que muda de piel desde que se desprendió

de las cadenas de la incomprensión.

Tres días malos, dos buenos.

De los tres malos, 

aún dos son rastrojos de Castilla.

Esa pesadumbre de la no aceptación:

"Me escogiste como madre de tus hijas,

para lo bueno y para lo malo"

Exhaustos, tras repetirse una y otra vez.

El bucle.

Las consecuencias. Inevitables.

De ocultar a una persona lo que debe saber.

De ocultar a una persona.

De ocultarla.

Hasta de su sangre.

<<Despierta ya. Toca fondo y sube de una vez...
Emerge a la superficie, vuelve a la marea>>.

Momo ya no puede cantar más nanas,

el tiempo se acabó, crecieron.

Pero aún son alevines dependientes. 

Asimilar con quién se comparten objetivos y lucha.

No más estigma, mamá.

Ya no más y menos de quien duerme al lado.

No hay nanas posibles, se pierde el sueño.

Gran Mamba lo dejó de hacer

porque ya no podía. Se olvidó.

Porque no tomó distancia a tiempo de los problemas.

Y se la tragaron. Junto con todas las ganas de vivir.*

El aprendizaje es la vida misma,

desgastando de manera inmisericorde 

a quien no tuvo las oportunidades

y flojito al fuerte con privilegios de cuna.

*<<Entonces sucedió que habló con Mr. Writer esta semana, su amigo del antro del alma, y se dio cuenta de algo que le hizo reflexionar después sobre la charla. Porque entre los anhelos de mamá Gran Mamba estaba cuidarles tan bien como lo hacía. Y pensó que hasta le debían la vida, no por gestarles y parirlos a sus hermanos y a ella, sino por su empeño que facilitó descubrir patologías a sus hijos con mucha antelación.- con enfermedades del tiroides infra detectadas hoy en día aún en el sistema de salud, una de las cuales Momo tiene diagnosticada desde hace más de 25 años-.
Algunas de ellas serias, que ponían en riesgo su salud o su bienestar, tanto a corto como medio y largo plazo>>.

<<Gracias a mi madre, definitivamente, sí. Estoy aquí. Y ello me hizo sentir otra vez orgullosa. De mi clase y orígenes.

La nana triste migrante acaba bien bonito>>.

 <<Por Todas las que no están, que nos cuidaron y que siempre estaremos echando de menos. Por las que nos seguiremos cuidando.
Por ese Amor Grande, brindar cada día.>>