3 mar 2022

Hay más.

 La inaudita ceguera. Siguen apareciendo trozos de instantáneas quemadas entre las cenizas de la hoguera. Detalles suficientes para que eche a andar la memoria. 

A veces releer las propias palabras es muy necesario cuando se cree en la autocrítica y en reírse primero de una misma, antes que de los demás y, preferiblemente, con los demás. Y de repente sucede. Caes en algo en particular que en tu babia tozuda del tiempo en que pasó lo gordo, no viste transparente y nítido ante tus ojos de perra vieja.

<<Matices de la historia que no cesan de empeorarla...>> 

28 de septiembre de 2019, volver al blog. Empezar a compartir textos en el antro y a la vez pasarlos al chat privado, porque muchas eran confesiones a él y varias atestiguaban el sufrimiento de Momo en los últimos tiempos. 

<<Porque sentía que él desconfiaba de mí, sufría>>, - pensaba ella. 

Supuestamente (¡Ay!) no iba al antro ni veía a Momo por allí, así que le pasó los enlaces de sus cartas varias veces, para comunicarse con él por fuera del antro y del chat, que casi nunca ya podía atender desde verano.

Esto, en particular, es tan surrealista como que era al contrario. Era su sino, al parecer. El lema de la relación mantenida más adecuado:

<<Es al contrario. Lo contrario. Todo al revés de lo que parece...>> 

Momo no debía fiarse de sus palabras, ni de sus silencios. Ni de sus extrañas reacciones explosivas, culpándola de situaciones que no eran por su causa, pero haciéndole sentir que sí. Que era incómoda, molesta... problemática. Estaba muy equivocada ella en la jactancia de la Carta Magna acerca de que no la podía putear más que otros (otro, concretamente) del pasado. Vaya si se equivocó, menuda hostia y pedazo de mentiroso.

Y hay más. Claro que si lees las cartas hay más rastros. Está cada pieza en su lugar. Solo hay que poner orden y método. Pero el registro es abundante y rico en esencias. De esas que transportan a escenas de todo tipo con los seres que pasaron por tu vida. 


<<Hay más corazones terrón como el de Momo. Son adictos al café e insomnes, como ella.>>